lunes, 26 de febrero de 2018

Oración III: Llámalo Padre


La primera palabra que dice un niño suele ser papá o mamá. Yo digo que mis hijos primero dijeron "papá" y mi esposa dice que primero dijeron "mamá". ¡En el cielo sabremos la verdad! Cuando ellos me dijeron "papá" por primera vez, mi corazón se alegró de una manera que nunca antes se había alegrado. A pesar de que soy también escritor, jefe, líder, no estoy interesado que me llamen así. ¡Quiero que me digan "papi" por el resto de mi vida!

¡Creo que nuestro Padre Celestial desea lo mismo!

Cuando Jesús vino y oraba a Dios diciéndole Padre, y cada vez que hablaba con otros acerca de Dios, siempre se refiriéndose a Él como Padre, fue algo revolucionario y hasta blasfemo para muchos judíos (Juan 10:36), pero no para sus discípulos. Quizás al comienzo les chocó escucharlo así, pero al ver los frutos de su vida, se convencieron que Jesús sabía lo que decía. Por eso una vez se le acercaron y le pidieron que les enseñe a orar. Jesús accedió a hacerlo, y cuando les dijo cómo deben orar, ¡LO PRIMERO QUE LES ENSEÑÓ FUE A QUE LE DIGAN "PADRE"!
"Señor, enséñanos a orar. Jesús les dijo: Cuando oren, díganle PADRE" (Lucas 11:1-2)
Hemos aprendido mal. Nos hemos acostumbrado a referirnos a nuestro Padre Celestial por sus muchos títulos, ¡menos por el que Él mismo nos insta a decirle! (Gálatas 4:6). El Espíritu Santo dentro de ti no está testificándote que tú eres Su creación, Su siervo, Su propiedad. Aunque somos todas esas cosas y más, ¡Él está testificándote que tú eres Su hijo! (Romanos 8:16).

Así como no se vería normal que un niño pequeño le diga a su papá: "¡Oh gran CEO!", "¡Poderoso Jefe!", o "¡Majestuoso Empresario!", no es normal que nosotros, SUS HIJOS, no lo veamos como PADRE por encima de cualquier otra cosa. Así como lo correcto sería que el niño diga orgulloso: "¡Mi papá es el jefe de esa poderosa compañía!", lo correcto sería que nosotros inflemos el pecho al decir: "¡Mi Padre es el Creador del Universo, el Poderoso Salvador, el Redentor de mi alma, es el Todopoderoso!"

La Ley hizo que lo israelitas no vean a Dios como su Padre, ¡pero Jesús nos acercó al Padre, nos hizo Sus hijos, ahora somos parte de Su familia! Cuando aprendas a llamar a Dios "Padre" de corazón, te aseguro que tu oración, y por ello, tu vida, cambiará.

¡Espero te haya ayudado!

No hay comentarios.:

Publicar un comentario