domingo, 7 de octubre de 2018

La Mesa del Descanso Vs La Mesa de la Angustia


El Salmo 23:5 dice que nuestro Padre "adereza una mesa" para nosotros. ¿A qué se refiere? ¿Qué mesa es esa que ha sido aderezada por nuestro Padre mismo y de la cual nos podemos servir? Bueno, dejemos que la misma Biblia conteste eso, y la respuesta la vemos en el segundo versículo:
"En lugares de delicados pastos me hará DESCANSAR; junto a aguas de REPOSO me pastoreará"
Este Salmo presenta a nuestro Padre como un buen Pastor y, por ende, a nosotros como Sus ovejas. Por lo tanto, ese pasto y esa agua del verso dos con el que somos alimentados vendrían a ser los alimentos aderezados que el versículo cinco se refiere. Ahora, ¿te diste cuenta qué cosa tiene en común el pasto y el agua con que nuestro Padre nos alimenta? Así es, descanso y reposo. En otras palabras, el alimento que nuestro Pastor nos da produce en nosotros descanso y reposo en nosotros (Mateo 11:29).

Tanto el pasto como el agua son símbolos de la Palabra de Dios y del Espíritu Santo porque de ellos nos alimentamos (Mateo 4:4, Juan 4:14, Juan 7:38, Isaías 55:10-11, Salmo 1:1-3). Entonces sabremos que estamos siendo alimentamos con la Palabra de Dios y el Espíritu Santo cuando ese alimento produce en nosotros descanso. Cuando practicas la presencia de Dios (en adoración, por ejemplo) y/o cuando recibes una Palabra de tu Padre Celestial, saldrás reposado, tranquilo, porque habrás dejado tus cargas en Él, porque confiarás que Él está a cargo, porque descansarás en la Palabra que recibiste. ¡ESO ES ALIMENTARTE DE LA MESA QUE TU PADRE ADEREZA DELANTE DE TI! (Salmo 23:5).

Pero vemos que el Salmo 23:5 no termina ahí, sino que agrega: "...en presencia de mis angustiadores". ¿Qué son esos angustiadores? Quiero ilustrarte una imagen que te ayudará a entender esto:
Delante de ti tienes dos mesas. Cada mesa tiene un buffet preparado para que tú te sirvas. Tú eliges de qué mesa te sirves. NADIE TE OBLIGA. Una mesa ha sido aderezada por tu Padre Celestial y tiene alimentos que producirán paz, descanso y reposo a tu alma. Esta mesa hace que te enfoques sólo en Jesús y lo que Él ha hecho por ti. La otra mesa está llena de alimentos que producirán angustia, preocupación, temor y ansiedad en ti. Esta mesa hace que te enfoques en lo que tú puedes conseguir con tus propias fuerzas. Estas dos mesas se encuentran en tu mente.
¿De qué mesa te estás sirviendo? ¿Te alimentas de la Mesa de Descanso o de la Mesa de la Angustia? ¿Te estás alimentando de la Palabra de tu Padre Celestial y practicando Su hermosa y reconfortante presencia en forma habitual? Porque si no lo estás haciendo YA TE ESTÁS ALIMENTANDO DE POR SÍ DE LA MESA DE LA ANGUSTIA, porque en esa mesa están esos informes médicos contrarios, los problemas familiares, las dificultades que pasas en tu trabajo, cualquier mala noticia que recibes están en esa mesa, y de ella te alimentas, y eso está produciendo angustia, estrés, preocupación y temor.

Cuando venga un problema, ¡llénate de la Palabra de tu Padre Celestial y busca Su presencia! No permitas que pensamientos acerca de lo grande que es tu problema llene tu mente porque acabarás lleno de angustia y temor. Pero si te llenas de las promesas de tu Padre y si buscas Su presencia, verás cómo Él empieza a producir un descanso sobrenatural en tu interior, ¡la paz de Dios que sobrepasa todo entendimiento gobernará tus pensamientos! (Filipenses 4:7)

Y más aun ¡te animo que te sirvas de la Mesa del Descanso siempre y no solo cuando venga un problema! Tú no tienes que producir descanso. ¡No! Ese descanso será producido por la Palabra de tu Padre y Su presencia en ti. Tú solo tienes que alimentarte de Él, y Él te dará ese reposo para tu alma. Entonces tu mente será llena con Su presencia ("unges mi cabeza con aceite") y tú reflejarás esa vida en abundancia ("mi copa está rebosando", Salmo 23:5) que tu Padre y tú desean.

¡Espero te haya bendecido!

--------------------------------

Estoy seguro que estos links sobre más enseñanzas de fe y gracia te ayudarán:

No hay comentarios.:

Publicar un comentario