sábado, 6 de enero de 2018

Enfócate en lo que tu Padre Celestial hace


Tu Padre Celestial no está intentando alcanzar al diablo, sino al revés. ¡Es el diablo que está intentando alcanzar a tu Padre! No hay competencia entre ellos. ¡Jesús ya venció!

¿A qué me refiero? Casi siempre pensamos que cuando tenemos problemas tu Padre Celestial tiene que hacer algo para solucionar la situación, es decir, que el diablo atacó primero y luego tu Padre viene a solucionar el problema, pero yo creo que es al revés. ¡Es tu Padre Celestial que ya está haciendo algo para bendecirte y el diablo está intentando que no lo recibas, y por eso te ataca!
Esos problemas no son otra cosa que el diablo que está haciendo algo para que no recibas lo que tu Padre Celestial está haciendo por ti.
Tu Padre no está cruzado de brazos mirándote cómo pasas por problemas y esperando que le pidas ayuda para recién hacer algo al respecto. Él ha comenzado a hacer algo aun desde antes de la fundación del mundo y lo terminó todo con Jesús, y es el diablo que intenta mentirte para que no recojas las bendiciones que te pertenecen.

Así que, cuando veas que estás pasando por muchos ataques, tómalos como una señal de desesperación del diablo que intenta hacer algo para que no recibas lo que tu Padre ya ha enviado. No te desanimes mirando sólo los problemas, porque justamente eso es lo que quiere el diablo. Muchas veces vemos más lo que el diablo hace que lo que nuestro Padre hace, y por eso nos desanimamos y no tomamos nuestra bendición.

Cuando Jesus nació, el diablo intentó hacer algo para matarlo (Mateo 2:16-18). Lo mismo pasó cuando Moisés nació (Éxodo 1:22). Para el pueblo de ese entonces, el tiempo que vivían era el más oscuro y, por su desánimo, no veían la bendición que había nacido, que estaba entre ellos.

Te animo a que abras los ojos y veas lo que tu Padre Celestial está haciendo. Todos esos problemas, muchos de ellos inexplicables, no son otra cosa que el diablo que intenta desanimarte, para que pienses que tu Padre no ha hecho nada, que se ha olvidado de ti y así decidas no tomar lo que te pertenece.

Cuando la Biblia dice que la tierra está llena de su gloria (Isaías 6:3), o que cada día te colma de bendiciones (Salmo 68:19), o que ya eres bendecido gracias a Jesús (Efesios 1:3), no es una mentira para que te sientas mejor, no es un truco motivacional para que aprendas a ver el vaso medio lleno y no medio vacío, sino que ¡es la verdad!

¡Sé fuerte y valiente y atrévete a mirar sólo que tu Padre Celestial está haciendo, y verás que tu ánimo cambiará, empezarás a ver lo que Él ya estaba haciendo y notarás que habían oportunidades y bendiciones donde antes no las habías visto!

¡Espero te haya bendecido! 😀

1 comentario: