lunes, 29 de mayo de 2017

¡Qué maravilloso lunes tuve!

De lunes a viernes normalmente mi día comienza a las 4:30am. Bueno, en realidad a esa hora suena mi despertador. Ya estoy de pie alrededor de las 5am preparando el almuerzo a mis Juanes para su colegio. La dejo a mi esposita dormir.

Después de los respectivos ajetreos mañaneros: "¡Apúrate!, ¡se hace tarde!, ¡toma tu desayuno!, ¡no te demores que quiero evitar el tráfico!", etc., estoy saliendo máximo a las 6:50am (si salgo más de las 7am, el tráfico hace que lleguemos tarde). Después de dejarlos al colegio antes de las 7:30 me dirijo a comprar insumos para el comedor. Normalmente regreso a casa alrededor del medio día.

De 12pm hasta casi las 4pm escribo. Ahora estoy escribiendo la segunda parte de la trilogía de "Gadol en Busca de la verdad", esta segunda parte se llama "La Autojusticación". Después llegan mis Juanes del colegio, y estoy con ellos hasta su hora de dormir que es a las 8pm. En ese tiempo estoy con ellos, hacemos tareas, les doy su cena, y mientras juegan, sigo escribiendo. Mi esposita Cecilia llega del comedor como a las 6pm, y mis Juanes la quieren aprovechar al máximo. Dos o tres veces por semana hacemos Santa Cena en familia antes que duerman.

Así fue hoy mi lunes. Fue un día normal. No hubo nada de "extraordinario". Pero gracias a Dios, pensando en "mi lunes", ¡me di cuenta que fue maravilloso!

Mi Padre me abrió los ojos por un momento y vi cuán bendecido soy por tener a mi esposita Cecilia a mi lado, y a mis hijos Juan Esteban y Juan Pablo conmigo. Me di cuenta que todos estamos sanos. Mi Padre me hizo ver que tengo un lugar propio para vivir, carro, colegio para mis hijos, dos trabajos independientes, y muchos sueños todavía por cumplir. Me di cuenta que pertenezco a la iglesia más maravillosa del mundo: Camino de Vida, y que tengo muchos amigos extraordinarios. Mi Padre me hizo apreciar por un momento mi día "normal", porque en el futuro, estos días serán los que más añoraré.

Sobre todo, mi Padre Celestial me hizo ver que todo esto es gracias a que Él es bueno y no me da lo me merezco sino según su Favor Inmerecido. Me hizo apreciar una vez que soy personado por la sangre de Jesús y aceptado como Su hijo. El cielo es mi futuro, el de mi familia y el de mis amigos.

Realmente ahora puedo decir ¡qué maravilloso lunes tuve!

Oro para que todos los días los pueda ver así.

Y, ¿cómo fue tu lunes?

2 comentarios:

  1. Me encantó eso de "dejo a mi esposa dormir" te felicito! En una sociedad machista da gusto leer cosas así. Con mi esposo somos iguales, un equipo que se apoya en todo. Saludos!

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