miércoles, 26 de abril de 2017

Sanidad Divina II - El Proceso de la Sanidad


¿Quién no ha escuchado o dicho alguna vez: "Pero oré y no se sanó", o peor: "Pero yo puse manos sobre el enfermo, hice la oración de fe, y se murió. ¿Qué pasó?" ¡Eso último me ocurrió a mí una vez! 😩

Muchos personas se frustran porque oran por los enfermos y no son sanados. Creen haber seguido todos los pasos que la Biblia dice: imponer manos, ponerse de acuerdo con otros, llamar a un líder de la iglesia, etc., pero aún así se desaniman al no ver ningún fruto manifestarse.

Creo que, en la mayoría de los casos, esa frustración viene por esperar que la sanidad se manifieste en forma inmediata o, al menos, muy próximamente. Recuerda que "uno se frustra cuando recibe algo diferente a lo que espera". Ellos esperaron una sanidad instantánea, y no fue así. ¿Qué recibieron? Recibieron UN PROCESO, pero ellos no lo sabían.

"Pero Jean Paul, ¿acaso Jesús no sanaba en forma instantánea?" Sí lo hacía..., en algunos casos. En la gran mayoría de los casos el proceso de la sanidad duró días, semanas, meses y quizás hasta años.

Jesús sanó a cientos de miles de personas (quizás hasta millones), pero obviamente no tenemos registrada uno por uno cada sanidad en la Biblia. Lo que leemos son cosas como: "Jesús fue de ciudad en ciudad y los sanó a todos" (Mateo 4:23-24, 8:16, Lucas 4:40, 6:17-19, etc.). En esos versículos están condensados gran parte del tiempo del ministerio de sanidad de Jesús, porque ¡te puedes imaginar cuánto tiempo le tomó en sanar a todas esas personas! Porque no dice que sanó a algunos cuantos, sino ¡a TODOS! ¿Cuántas personas enfermas podrían haber en una sola ciudad? Considera que la ciencia médica (¡cuyos conocimientos vienen de Dios, por si acaso!) en ese entonces no era tan buena como hoy en día, por lo que no nos equivocaríamos en estimar un número alto de enfermos.

Uno podría decir, "pero Jesús tiene el poder de sanar a todos en un segundo". ¡Claro que lo tiene! Y, ¡claro que quiere hacerlo así! Pero el recibir la sanidad no depende de su poder ni de su voluntad, sino de tu fe (¡eso es para otro blog 😁!). Además, si hubiera ocurrido así en donde Jesús sanó a todas las ciudades (o al menos una) en forma instantánea, no tengo la menor duda que estuviera registrado aquel super milagro en la Biblia.

Mira cómo fue el proceso de sanidad de esas miles de personas:
La fe viene por el oír de la Palabra de Dios (Romanos 10:17, específicamente la Palabra de la Gracia de Dios, -eso también es para otro blog 😛).

  1. Esas cientos de miles de personas escucharon de algún modo la Palabra de Dios acerca de que Jesús puede sanarlos. Puede haber sido que lo escucharon directamente de Jesús, de algún otro, o por la cantidad innumerable de testimonios de sanidad. Yo me inclino por este último.
  2. Esa palabra empezó a ser meditada en su corazón por algún tiempo; el tiempo suficiente como para que se convencieran ("la convicción de lo que no se ve",  Hebreos 11:1) que valdría la pena el esfuerzo de ir hasta donde estaba Jesús. Es ahí cuando se formó la fe en su corazón. Cuando apenas escucharon la Palabra de Dios, no era fe todavía, sino solo una semilla; pero la semilla maduró y se volvió fe gracias a que meditaron en ella. Por ejemplo, dice la Biblia que la mujer con el flujo de sangre se decía, "si tan solo toco el borde del manto de Jesús, seré sana" (Marcos 5:28). ¡Eso es meditar!
  3. "¡¿Ya se sanaron?!" Todavía no. Tenían que actuar sobre esa Palabra que se volvió fe, ya que "la fe sin obras es muerta" Santiago 2:17.
  4. Entonces, una vez convencidos que encontrarían la sanidad en Jesús, emprendieron su camino hasta donde Él estaba. A muchos les tomó mucho esfuerzo, sacrifico y tiempo, pero llegaron.
  5. Una vez con Jesús, Él los sanó instantáneamente. EL PROCESO TERMINÓ.

El proceso comenzó cuando escucharon por primera vez que Jesús los podía sanar y terminó cuando Jesús los sanó.
El leproso de Mateo 8:1-3, el criado del centurión de Mateo 8:5-13, la mujer con el flujo de sangre de Marcos 5:21-42, el ciego Bartimeo de Marcos 10:46-51, la mujer sirofenicia de Marcos 7:24-30, entre otros, son ejemplos que ilustran este proceso. Todos ellos escucharon de alguna manera que Jesús podía sanarlos, meditaron en ello por algún tiempo hasta convencerse, es decir, hasta que se formó la fe, actuaron basados en esa fe y, finalmente, Jesús los sanó.

Así que, lo que leemos en los evangelios que Jesús puso la mano sobre alguien y sanó, es solamente la punta del iceberg, el final de un proceso que duró mucho para la mayoría.

Hubo veces que, sí, la sanidad fue instantánea y el enfermo no espero nada. Pero son excepciones a la regla. Creo que no llegan ni a 5 casos registrados: El hombre de la mano seca (Mateo 11:9-14), la resurrección del hijo de la viuda de Naín (Lucas 7:11-17, aunque esto no es sanidad sino resurrección), el paralítico de Betesda (Juan 5:1-11) y la mujer jorobada (Lucas 13:10-17). ¿Se me olvida uno? Si es así, ¡anótalo en el comentario!

Además, en estos casos mencionados, el enfermo no se acercó a Jesús, sino fue Jesús quien se acercó al enfermo; y en la mayoría de ellos fue un sábado (excepto el caso de la resurrección del hijo de la viuda de Naín). Creo que hay una linda enseñanza ahí. Si tienes alguna revelación, ¡me gustaría escucharla!

ENTONCES, te pregunto, ¿de dónde crees que se debe sacar la "regla a seguir" para recibir sanidad?, ¿de los millares de personas que siguieron el mismo proceso o de aquellas contadas excepciones? ¡Obviamente la pauta a seguir la marca aquellos cientos de miles que recibieron su sanidad a través de un proceso!

No dudo que Dios puede sanarte soberanamente sin que se lo pidas. Pero si se lo estás pidiendo y todavía no estás sanado, adivina qué, ¡estás dentro del proceso!

Así que, si estás orando por sanidad propia o por alguien más, ¡NO TE RINDAS! ¡No creas que porque no fue instantánea no se manifestará la sanidad! ¡Sigue declarando la Palabra! ¡Sigue pidiendo oración! ¡Sigue intercediendo hasta que veas la sanidad manifestada! No te frustres porque no ves la sanidad manifestada ya que ¡estás dentro del proceso! Y más aun, ¡estás dentro del proceso Bíblico!


"Así que no pierdan la confianza, porque esta será grandemente recompensada.
Ustedes necesitan perseverar para que,
después de haber cumplido la voluntad de Dios,
reciban lo que Él ha prometido."
Hebreos 10:35

¡Espero te haya ayudado!

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Visita estos links que hablan de sanidad divina para seguir profundizando un poquito más 😃:

2 comentarios:

  1. Concebimos un milagro en lo espiritual como cuando engendramos un hijo, aún no lo sentimos ni lo vemos pero ya existe en el mundo espiritual! Que importante entender que debemos creer a pesar de lo que sientes, y declarar que aquello que anhelamos ya existe. Gracias a una predica de Joseph Prince encontré que la Biblia New King James de estudio está traducida literal del Hebreo y en esta Biblia solo habla en tiempo presente o pasado y no hay futuro más que para validar algo que ya estaba hecho. Que Increíble es Dios como el no tiene tiempo ya Somos Sanos! Ya Somos prósperos! Solo debemos confiar y creer porque el quiere y ya hizo todo!
    Comenzaré a estudiar sobre la resurrección de la viuda estoy segura que Dios tiene un regalo de Fe para nosotros por ahí!
    Gracias amigo por esta palabra! Eres de los que siempre me animan a que mi FE crezca!

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    1. Te queremos mucho cinthy!! Tú y tu familia son un constante ánimo a nosotros!!

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